Las uñas son una carta de presentación tan poderosa como el maquillaje o el perfume, explica Ana Martín maquilladora profesional de MIA Cosmetics Paris. De hecho, tendemos a fijarnos más de lo que creemos en las manos y una manicura bien hecha transmite cuidado, estilo y seguridad. Pero incluso las más adictas a la belleza caen en rutinas o errores que perjudican la duración del esmalte.

1. 1. No preparar la uña antes de aplicar el esmalte: Según la experta, el primer error es no limpiar la superficie de la uña de manera adecuada. Aplicar esmalte sobre restos de grasa, suciedad o crema provoca que se levante rápidamente. Es fundamental limpiar la uña antes con un quitaesmalte sin acetona y dejarla secar.

Recomendación: Quitaesmaltes Ultrasuave Express Sponge. El Ultra Gentle Nail Polish Remover ha sido diseñado para retirar el esmalte de manera efectiva mientras cuida la superficie de la uña. Su fórmula suave y equilibrada ayuda a mantener la hidratación, evitando la sensación de sequedad o fragilidad.

2. No aplicar una base: Muchas personas prescinden de la base, pero se trata de un paso esencial. La base no solo protege la uña de posibles pigmentaciones, sino que también mejora la adherencia del color. Es el secreto de una manicura más duradera.

Recomendación: Base fortalecedora de MIA. Rellena estrías para un acabado 100% liso. Está enriquecida con Vitamina E y aumenta la duración del esmalte.

3. Dar capas demasiado gruesas: Otro de los errores que más veo es la impaciencia. Cuando aplicamos capas muy cargadas, el esmalte no llega a secar bien, se generan burbujas y el acabado se estropea antes. La clave está en dar capas finas, dejando secar entre una y otra.

4. No sellar el borde de la uña: Un gesto tan simple como este puede cambiar el resultado. El borde de la uña es el primer punto de fricción. Si no se sella con una ligera pasada de pincel, el esmalte se descascarilla enseguida.

Recomendación: Barricade. Es un protector delimitador para manicura. Se trata de un protector líquido peel off en base agua. Sirve de barrera protectora para conseguir una manicura perfecta, de manera que tus cutículas y piel de alrededor de la uña no se manchen de esmalte.

5. Olvidar el TOP Coat: Por último, muchas personas dejan de lado el top coat, un paso que actúa como escudo protector. Un buen top coat prolonga la vida del esmalte y mantiene el acabado brillante. Incluso recomiendo reaplicarlo cada dos o tres días. Mi favorito es el que deja efecto gel porque le da un toque de brillo a la uña.

Recomendación: Top Coat Gel Effect. Producto con efecto Gel y brillo Máximo. De secado Ultra-Rápido. Aumenta la duración del esmalte.